En su discurso titulado “La histología médica. Su ser y su tiempo” abordó la actualidad y el significado del tejido como entidad microscópica fundamental existente entre los niveles molecular y anatómico del cuerpo humano. Comparó los tejidos biológicos frente a los tejidos artificiales generados por distintos mecanismos de ingeniería tisular, incluidos los organoides en chip, y enfatizó sobre las funciones terapéuticas de ambos, así como sobre la función como biomodelos de los segundos con el objetivo de sustituir, progresivamente, la experimentación animal. Finalmente sustentó, en ambos tipos de tejidos, las características de la histología médica actual y su diferencia en objetivos y aplicaciones médicas con la histopatología. De igual modo estableció los próximos retos de la histología médica y estimuló a los histólogos jóvenes a conquistar el futuro al servicio de la medicina y la sociedad.